¿Qué son las masas gigantes en el cuello del feto?

Las masas gigantes en el cuello del feto, como el teratoma cervical y el linfangioma, pueden alcanzar tales proporciones que las vías respiratorias fetales se distorsionan y se obstruyen. En una pequeña cantidad de pacientes con teratoma cervical, la afección puede producir hipoplasia pulmonar o subdesarrollo de los pulmones.

Además de obstruir las vías respiratorias, estas masas gigantes pueden comprimir el esófago, lo que produce polihidramnios, que puede provocar complicaciones en el embarazo y un parto prematuro. Las masas gigantes en el cuello del feto, si no se las detecta, pueden ser mortales, dada la incapacidad de garantizar una vía respiratoria y ventilar al bebé tras el parto. Si la demora dura más de cinco minutos, puede producirse daño cerebral. Esto ilustra la importancia del diagnóstico prenatal y la planificación del parto, ya que la mayoría de los niños con masas gigantes en el cuello tienen una anomalía aislada y sanan bien después de la resección posnatal.

Las masas gigantes se suelen detectar mediante ecografía. Cuando se deriva a los pacientes al Centro de Diagnóstico y Tratamiento Fetal (CFDT) con un diagnóstico de masa en el cuello del feto, nuestro equipo multidisciplinario especializado realiza una evaluación profunda para confirmarlo.

Monitoreo y parto

Si la masa en el cuello es pequeña y no compromete las vías respiratorias, puede vigilarse el crecimiento de la masa mediante ecografías durante todo el embarazo.

Si existen masas de mayor tamaño que producen polihidramnios, las opciones de tratamiento durante el embarazo incluyen reposo, medicamentos para reducir el líquido amniótico o procedimientos comunes para eliminar el exceso de líquido del útero (amniocentesis).

Si la polihidramnios persiste y la masa sigue creciendo, es posible que el bebé deba nacer con el procedimiento EXIT. El EXIT es un procedimiento quirúrgico que se usa en partos de bebés con una compresión de las vías respiratorias por teratomas cervicales, higromas quísticos o bloqueo de las vías respiratorias, como el síndrome obstructivo de las vías aéreas superiores (CHAOS, por sus siglas en inglés). Es similar a una cesárea, pero con algunas diferencias importantes.

Tratamiento de las masas gigantes en el cuello

Las masas gigantes en el cuello suelen extirparse con cirugía después del nacimiento. El procedimiento EXIT concede tiempo para realizar los procedimientos que suelen necesitar los bebés que nacen con masas gigantes en el cuello, como laringoscopía directa, broncoscopía, traqueostomía, administración de surfactante, descomprensión de quistes y resección de tumores. Algunos de estos procedimientos, o todos ellos, pueden ser necesarios para asegurar la vía respiratoria y brindar una ventilación adecuada.

Algunos bebés necesitan ayuda temporal para respirar y comer. La compresión de la tráquea puede ablandarla, lo que la hace proclive a desmoronarse. Por ese motivo, a veces se realiza una traqueostomía temporal para que el bebé respire normalmente hasta que la tráquea se endurezca.

Además, algunos bebés pueden necesitar que se los alimente en forma total o parcial mediante un tubo que va directo a su estómago.

Es fundamental la coordinación con un equipo experimentado de cirujanos pediátricos, anestesiólogos fetales y maternos, obstetras, neonatólogos y enfermeros obstétricos, neonatales y quirúrgicos para lograr un excelente resultado en los bebés con diagnóstico de masas gigantes en el cuello durante el embarazo.