Bronquitis plástica
¿Qué es la bronquitis plástica?
La bronquitis plástica es un trastorno del flujo linfático que causa problemas respiratorios graves. En los niños que la padecen, se acumula linfa en las vías respiratorias y forma tapones de consistencia gomosa o similar a la masilla (que se conocen como moldes). Esos moldes obstruyen las vías respiratorias y dificultan la respiración.
Los trastornos del flujo linfático son un grupo de enfermedades que se caracterizan por la circulación anormal de la linfa. Los vasos linfáticos transportan linfa a las venas, desde donde esta vuelve al torrente sanguíneo, y cumplen un rol esencial en la función inmunitaria y el transporte de grasas y proteínas.
Las lesiones del conducto torácico (la vena linfática principal), las anormalidades congénitas o las presiones venosas excesivamente elevadas pueden ocasionar problemas del flujo linfático y la fuga de linfa hacia el tórax, el abdomen u otras cavidades del cuerpo. Con la bronquitis plástica, la circulación anormal produce fuga de linfa hacia el interior de las vías respiratorias.
¿Por qué elegirnos?
El Centro de Diagnóstico por Imágenes e Intervenciones Linfáticas de Children’s Hospital of Philadelphia brinda atención altamente especializada a niños y adultos con goteos linfáticos y trastornos del flujo linfático.
Por qué elegir el Centro de Diagnóstico por Imágenes e Intervenciones Linfáticas
Tratamiento de la bronquitis plástica
Trata la bronquitis plástica un equipo de expertos que se especializan en diagnóstico por imágenes e intervenciones linfáticas. En Children's Hospital of Philadelphia (CHOP), los pacientes tienen acceso a un Centro de Diagnóstico por Imágenes e Intervenciones Linfáticas especializado. El tratamiento depende de la causa exacta y la anatomía del paciente.
En todos los casos, el primer paso implica un mapeo detallado de la anatomía y el flujo del sistema linfático. Para ese fin, se utiliza una técnica especializada de imágenes por resonancia magnética llamada linfangiografía de resonancia magnética con contraste dinámico. Durante el procedimiento, se inyecta directamente en el sistema linfático un agente de contraste para las imágenes por resonancia magnética.
Después del procedimiento, se coloca un catéter pequeño en el canal linfático principal, llamado conducto torácico, para resaltar más los conductos anormales que rodean las vías respiratorias.
Tras identificar los conductos anormales, se los sella mediante un procedimiento llamado embolización selectiva de conductos linfáticos. Usted o el médico de su hijo utilizarán aceite, espirales, partículas, pegamento u otros agentes de unión, que se insertan por un tubo diminuto (catéter) para sellar los conductos.
En lo posible, se tiene cuidado de no obstruir el conducto torácico principal: un enfoque que, según los expertos de CHOP, es importante para el éxito de este procedimiento. Como la linfangiografía posibilita a los médicos clínicos precisar el punto exacto de la fuga, pueden apuntar la intervención a la zona afectada y preservar, de ese modo, el conducto torácico.
El tratamiento de la bronquitis plástica en pacientes con cardiopatías también puede incluir procedimientos cardíacos intervencionistas tales como dilatación con balón, dilatación de un vaso estrecho con stent, o embolización de un vaso sanguíneo anormal con espirales.
Es posible que a su hijo también le receten medicamentos para reducir la inflamación, disminuir las presiones venosas o disolver los moldes.
